La semana pasada vi The Road[La Carretera], película actualmente en cartelera, y la segunda del mismo estilo, luego de The Book of Eli[El Libro de Eli]. Estas películas son como la pareja Armaggedon e Deep Impact[Impacto Profundo], sólo que ahora el hecho apocalíptico pasa a segundo plano, y nos enfocamos a cómo reaccionan los personajes a una situación donde no saben bien como llegaron, pero en la que el caos y las pandillas imperan, y la mayor preocupación es que no te coman, literalmente.
Puede ser un poco extremista, pero el terremoto del 27F puedo haber sido el inicio de algo como eso. Recuerdo a vecinos diciendome que ‘mejor nos preparáramos con cuchillos y palas’, para cuando vinieran a saquear la villa. Y casi fue así.
Mis conclusiones del 27F son dramáticas: la sociedad que hemos construido -o mas bien donde vinimos a caer, pero eso da para otro artículo- es peligrosamente frágil. El contrato social que firmamos para bajarnos de los árboles se destruye al moverse un poco la tierra y al pederse la energía de las torres de telefonía celular.
Las películas son exageradas en este ámbito. Espero. Sin embargo, da para cuestionarse cómo reaccionaremos cuando nos toque vivir una nueva situación extrema. ¿Dónde estamos fallando como sociedad? ¿Qué hubiese pasado en Talcahuano si no hubiese habido comunicación por, digamos, una semana?